Son tomas de agua situadas en lugares de los edificios que tienen además el equipamiento necesario para hacerla funcionar.
Una BIE suele estar dentro de un armario, en el que cuál tenemos una entrada de agua con una válvula de corte y un manómetro para comprobar en cualquier momento el estado de la alimentación. Está provista de una manguera que puede estar plegada (en plegadera) o enrollada (en devanadera), con su boca de salida compuesta por lanza y boquilla.
Las mangueras pueden ser de 25 y 45 mm de diámetro permitiendo un gran caudal de 1,6 y 3,3 litros por segundo respectivamente.
El armario está cerrado con un vidrio, con la inscripción "Rómpase en caso de Incendio".
Incluye: Armario, Soporte de manguera, Válvula de sección, Manguera, Racores de conexión, Lanza y Boquilla.
El agua, considerada como agente extintor del fuego actúa por enfriamiento sobre el foco de conbustión siendo aplicada para conseguir el mayor efecto de absorción de calor por diferentes medios como rociadores (sprinklers), cortinas de agua, columnas hidrantes, bocas de incendio, etc. Todos estos sistemas requieren agua a presión disponible en una red presurizada permanente.
Ante la eventualidad de un incendio y cuando se produce una demanda de agua, ya sea por la apertura de una boca de incendio o automáticamente por los rociadores instalados, el equipo de bombeo proporciona el caudal requerido por el sistema poniendo en servicio su bomba principal y alimentando así todos los puntos requeridos.
Los grupos de presión además estáran alimentados de agua mediante sistemas auxiliares como son depósitos, aljibes etc.